Hemos participado en un taller práctico en los laboratorios de la Science Gateway con Sergi Rodríguez donde hemos construido una cámara de niebla: un dispositivo sencillo y al mismo tiempo mágico, que permite ver con nuestros propios ojos el paso de partículas subatómicas.
Con hielo seco, alcohol isopropílico y todas las medidas de seguridad necesarias, hemos recreado un entorno en el que las partículas cargadas dejan rastros visibles al atravesar una mezcla sobresaturada. Cada traza fugaz que aparece en la niebla es el paso de una partícula real: electrones, positrones, muones, partículas alfa...
Es una experiencia que une ciencia, emoción y asombro. Saber que esas partículas atraviesan nuestro cuerpo constantemente, y que ahora podemos "verlas", transforma completamente la forma en que entendemos el mundo.
Una actividad fascinante que me ha dejado con la sensación de estar observando directamente lo invisible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario